Expertos dicen que problemas relacionados con la calidad deficiente de sueño, como la exposición a la luz y determinadas conductas, deberían abordarse antes de recurrir a la hormona melatonina. Si se utiliza, el inicio diario de secreción de melatonina natural de un individuo debe tomarse en cuenta antes de decidir la dosis apropiada del suplemento.
La melatonina, que está disponible mediante venta sin receta en Estados Unidos, suele recomendarse en forma aguda para los horarios de sueño afectados, por ejemplo, por desfase horario (jet lag) o de manera crónica para determinados trastornos del ritmo circadiano. También se ha considerado como algo cercano a una panacea y hay quienes incluso sugieren que puede tratar cáncer, disfunción cognitiva y obesidad.
La American Chemical Society produjó un video que desacredita muchos de los mitos en torno a la melatonina y sus efectos, como la magnitud de sus beneficios para mejorar el sueño.
¿Cómo utilizar mejor la melatonina?
Lo primero es determinar el inicio de producción de melatonina, conocido como inicio de secreción de melatonina en condiciones de luz tenue y su duración en cada paciente, y usar esto como guía para la prescripción. Sin embargo, típicamente no es factible determinar el inicio de secreción de melatonina en condiciones de luz tenue en la práctica clínica cotidiana.
Por tanto, un método sustitutivo más práctico es tomar la hora en que por lo general el paciente se acuesta a dormir.
Dado que la mayoría de las formulaciones de melatonina tarda aproximadamente 45 minutos en alcanzar su biodisponibilidad, recomiendan que se tome alrededor de una hora antes de la hora de acostarse, exactamente a la misma hora cada día.
Sin embargo, en términos de la dosis, no hay un consenso en la literatura.
Lo que se sabe es que las personas jóvenes que toman entre 0,1 y 0,3 mg de melatonina tendrán una concentración plasmática del orden de 100 a 200 pg/ml, lo que se considera dentro del rango fisiológico.
Medscape.