El Premio Nobel de Fisiología o Medicina se otorgó esta mañana a dos estadounidenses y un británico por el descubrimiento del virus de la hepatitis C, descubrimiento que ha «salvado millones de vidas».
El Dr. Harvey J. Alter, de los National Institutes of Health, en Bethesda, Estados Unidos; el investigador británico Michael Houghton, Ph. D., de la University of Alberta, en Alberta, Canadá, y Charles M. Rice, Ph. D., de la Rockefeller University, en Nueva York, Estados Unidos, comparten el premio, como lo anunció esta mañana la Asamblea Nobel en el Karolinska Institutet en conferencia de prensa en Estocolmo, Suecia.
El anuncio señaló: «Por primera vez en la historia la enfermedad se puede curar, lo que aumenta las esperanzas de erradicar el virus de la hepatitis C de la población mundial».
Incluso con el descubrimiento de los virus de la hepatitis A (aislado por primera vez en 1979) y de la hepatitis B (descubierto en 1965), la mayoría de los casos de hepatitis transmitida por la sangre permaneció sin explicación. El descubrimiento del virus de la hepatitis C por parte de los científicos reveló la causa de los casos restantes de hepatitis crónica y dio lugar a análisis sanguíneos y fármacos que «han salvado millones de vidas», señaló el comité.
«Gracias a su descubrimiento ahora se encuentran disponibles análisis sanguíneos altamente sensibles para el virus, y estos esencialmente han eliminado la hepatitis postransfusional en muchas partes del mundo, mejorando enormemente la salud mundial», destacó Thomas Perlmann, secretario del comité, al anunciar la premios, según Associated Press.
Su trabajo también condujo al rápido desarrollo de fármacos antivirales para la hepatitis C.
Gilbert Thompson, profesor emérito de lipidología clínica en el Imperial College London, en Reino Unido, comentó a la cadena de noticias CNN que el premio por el descubrimiento de 1989 está «muy retrasado».
«Podría decirse que la hepatitis C ha causado tantas muertes como la actual pandemia de coronavirus, si no es que más. Fue un problema importante, y este trabajo significó un enorme paso adelante», puntualizó.
Los fármacos antivirales desarrollados para tratar la infección por virus de la hepatitis C también pueden ser efectivos contra COVID-19, sugiere un nuevo informe.
Perlmann dijo que tuvo que llamar varias veces antes de comunicarse con el Dr. Alter y con Rice, informó CNN.
«Los desperté y estaban muy sorprendidos, definitivamente no esperaban sentados junto al teléfono. Pero una vez que les di la noticia estaban extremadamente sorprendidos, muy felices, y casi sin palabras, así que fue muy divertido hablar con ellos», comentó.
La Organización Mundial de la Salud estima que 71 millones de personas tienen infección crónica por el virus de la hepatitis C. Un número significativo de personas con infección crónica desarrollará cirrosis o cáncer de hígado.
El premio se acompaña de una medalla de oro y más de 1,1 millones de dólares, que se repartirán entre los tres galardonados.
Medscape / Tendencias en Medicina.