La llegada de la pandemia de la COVID-19 ha conseguido más avances en la telemedicina en un par de meses que en todos los años que se ha estado intentado implementar en sanidad.
Todo ello tiene unas ventajas y también unos inconvenientes tal como se discutió en una de las sesiones del e-Congreso de la Sociedad española de Cardiología (SEC) 2020.
Teleconsulta, aplicaciones móviles y recogida de datos
La teleconsulta o consulta por teléfono o video ha permitido a los cardiólogos continuar con el seguimiento de los pacientes. Sin embargo, existen brechas por parte de pacientes y profesionales ya que a algunos de ellos les cuesta adaptarse a las nuevas tecnologías. Aunque tiene grandes ventajas de esta modalidad de consulta en línea, ya que puede mejorar tanto la asistencia, la prevención y el seguimiento de los pacientes.
Sin duda, una de las cuestiones más necesarias para la implantación de la telemedicina es resolver los aspectos legales (protección de datos, integración de plataformas y fuentes de información), tanto por parte de los facultativos como por parte de los pacientes.
Todos los ponentes coinciden en que no es adecuada para la primera visita, ya que la pantalla puede ser una barrera y en el primer encuentro es muy importante el contacto directo con el paciente. Además, en los casos en los que sea necesario prescribir medicamentos el hecho de que la primera visita sea virtual puede llegar incluso a ser peligroso.
Como grandes avances, los ponentes destacaron el papel de la receta médica electrónica del Sistema Nacional de Salud (SNS) que ha supuesto una gran ayuda. No solo ha contribuido a un ahorro de visitas innecesarias, sino también ha significado un salto de calidad en el control del farmacéutico, un mejor cumplimiento del tratamiento, además de facilitarle al paciente el acceso rápido a su medicación.
Respecto a las aplicaciones móviles de salud todos son muy cautelosos a la hora de recomendar alguna, ya que se requiere de la validación necesaria.
También se nombraron los beneficios de los dispositivos de recogida de datos (valores de tensión, peso, frecuencia cardiaca, etc) desde casa a través de dispositivos portables (wearables), de pacientes que tienen enfermedades crónicas, como insuficiencia cardiaca. Esta recogida de datos no solo es útil para el manejo del paciente a distancia, sino que además es muy ventajoso para la realización de estudios.
Formación continuada en línea
Otro de los temas tratados en la mesa fue la teleformación. La formación continuada en línea permite el acceso a los cursos cómo, cuándo y desde dónde quiera el usuario, adaptándose a sus necesidades. Es una fórmula muy útil también para la asistencia a congresos, en los que seguramente se mantendrá una fórmula semipresencial con participación vía internet de ponentes muy solicitados sin la necesidad de que tengan que asistir personalmente. No obstante, esta modalidad de congresos también tiene sus limitaciones, porque a veces el profesional se puede sentir sobresaturado de eventos e información que debe asimilar además, durante su tiempo libre.
Se comentaron también las ventajas de las videoconferencias para reuniones de trabajo de cardiología, ya que no solo suponen un ahorro de tiempo, sino que además mejoran la calidad de vida de los profesionales. Aunque todos coinciden que el primer contacto entre profesionales siempre es mejor que sea persona a persona, para después pasar a reuniones en línea.
Imagen: la gran revolución digital en cardiología
Sin duda, la gran revolución digital en cardiología es la imagen. Ya existen dispositivos, basados en inteligencia artificial, que ofrecen imágenes de ecografía de alta calidad a través de dispositivos móviles y están conectados a una app que permite un uso flexible y portátil. Lo que está claro es que todo lo
automatizable se va a automatizar dado que la inteligencia artificial en la medicina no solo es capaz de analizar enormes cantidades de información de pruebas de imagen o de historiales de pacientes, siendo capaz de ayudar en el diagnóstico o en la prescripción de los fármacos más precisos para cada caso.
¿Hacia una gestión totalmente digital?
El problema en el que coincidieron los ponentes fue la integración de todos los datos disponibles de centros sanitarios de primaria y hospitalaria en una única plataforma, ya sea a nivel de comunidad, a nivel estatal y a ser posible, nivel europeo. El futuro es muy prometedor sobre todo para las administraciones porque va a ayudar a mejorar la gestión de recursos tanto humanos como económicos.
¿Cómo afectará la tecnología en la práctica clínica dentro de 5 años?, la respuesta a esta pregunta sigue siendo una incógnita.
Medscape / Tendencias en Medicina.

