Muchas enfermedades cardíacas aún son poco conocidas por lo que permanecen en el anonimato. En Farmanuario te compartimos siete de ellas.
Síndrome de Brugada
Enfermedad ocasionada por la alteración de los genes que originan los canales que regulan el paso de los iones a través de la membrana celular del corazón. Es de origen genético y perteneciente al grupo de las canalopatías, En los casos más severos, la enfermedad puede derivar en desórdenes eléctricos, que pueden ir desde la aparición de arritmias hasta la muerte súbita.
Suele afectar a hombres alrededor de los 30 años de edad.
Enfermedad de Kawasaki
Es una inflamación generalizada de las arterias del organismo y aparece en niños menores de cinco años. Sus síntomas comienzan con un cuadro febril que no responde a antibióticos. La complicación más grave es la aparición de aneurismas coronarios, una dilatación de las arterias del corazón, que se da hasta en el 20% de casos. Además de fiebre, los signos que suelen aparecer son conjuntivitis bilateral, cambios de la mucosa de la boca, edema y enrojecimiento de los miembros o descamación de la piel, entre otros.
Valvulopatías
Como su nombre indica, estas enfermedades afectan a las válvulas del corazón. Estas se abren y se cierran durante el ciclo cardíaco, permitiendo así el paso de la sangre de una cavidad a otra. Las válvulas del corazón son 4; mitral, aórtica, pulmonar y tricúspidea, y todas ellas pueden verse afectadas, por causas como infecciones, traumatismos, envejecimiento, etc.
La más frecuente es la valvulopatía degenerativa en personas mayores, que consiste en el endurecimiento y calcificación de las válvulas, lo que limita su movilidad y afecta a su funcionamiento.
Endocarditis infecciosa
Es la infección producida por la llegada de un microorganismo a través de la circulación, generalmente bacterias, generando la inflamación del revestimiento interno de las válvulas y cavidades cardiacas, que crecen formando vegetaciones. A pesar de ser una enfermedad grave y que puede ser mortal, la recuperación sin secuelas no es rara si se trata adecuadamente.
Síndrome de Wolff-Parkinson-White
Los pacientes con esta enfermedad con nombre propio sufren arritmias acompañadas de anomalías en el sistema de conducción cardíaco, dado por vías accesorias que generan una comunicación eléctrica anormal entre aurículas y ventrículos. Existe un riesgo de muerte súbita ligeramente superior al de la población general, por lo que mediante sígnos indirectos (aparición de arritmias o algunas características en el electrocardiograma) y directos (caracterización de la vía accesoria) puede estimarse el riesgo de muerte súbita.
Foramen oval permeable
El foramen oval es una apertura natural que permite el paso, durante la vida fetal, de la sangre oxigenada de la aurícula derecha a la izquierda, de modo que el oxígeno y los nutrientes que llegan de la madre a través de la placenta y la vena umbilical puedan llegar al cerebro y resto de órganos fetales.
En el momento del nacimiento, el aumento de la presión en la aurícula izquierda favorece su cierre progresivo. En algunas personas no se produce este cierre, permaneciendo abierto tras el nacimiento, lo que se conoce como foramen oval permeable. En la mayoría de los pacientes no se produce ningún síntoma y se descubre de forma casual al hacer un ecocardiograma por otra causa, o por la aparición de soplos.
Síndrome de Marfan
En esta enfermedad el principal afectado es el tejido conectivo. Formado por las proteínas que actúan sobre la piel, los huesos, los vasos sanguíneos, y otros tejidos, actúa como “pegamento” de todas las células, entre otras funciones indispensables.
El problema radica en una alteración genética en el cromosoma 15, que puede darse tanto en hombres como en mujeres. Las mutaciones que se producen en genes de este cromosoma dan lugar a problemas en proteínas que forman parte del tejido conectivo. Generalmente se transmite de padres a hijos a través de genes, pero aproximadamente el 25% de los pacientes no tiene ningún padre afectado.
Muy Interesante/ Tendencias en Medicina.