La agresividad se entiende como la tendencia de un sujeto de actuar o responder violentamente con una conducta dirigida hacia otro individuo.
En realidad, lo agresivo no es el perro, sino su conducta.
La mayoría de los perros que atacan lo hacen activando su instinto de defensa.
Tu perro tiene una conducta agresiva cuando muestra señales de agresión dirigida hacia otros sujetos como por ejemplo:
Ladrar
Tensar y saltar
Gruñir
Morder
Consejos si tienes un perro agresivo
Es importante tener en cuenta que la conducta agresiva puede aparecer por un gran número de causas y lo primero que tenemos que hacer es evaluar el problema para llegar al origen y establecer un programa de modificación de conducta con un profesional cualificado.
- Elegir un buen pack de seguridad
El arnés: resistente, seguro y del que el perro no pueda salir bajo ningún concepto.
La correa: en perfecto estado.
El bozal: para evitar mordidas pero que permita al perro jadear adecuadamente, incluso comer y beber.
- El paseo
Elige horas poco transitadas y avenidas amplias
- Atención a su lenguaje
Muchas veces los perros antes de atacar avisan.
Se tensan, antes de lanzarse hacia otro perro.
Estas pequeñas señales son micro-precursores de la conducta y delatan toda la intención del perro.
Ten paciencia y no te rindas: los cambios de conducta llevan su tiempo, confía en que estás construyendo una base sólida para el cambio.
Busca ayuda: existen profesionales de la conducta animal. Aprende los criterios para identificar uno adecuado en este artículo.