En la era digital, la disponibilidad de los médicos para atender urgencias o consultas de seguimiento se ha incrementado ante la presencia de herramientas como WhatsApp, que los pacientes utilizan sin dudar.
El uso de estas herramientas digitales pueden tornarse confusas, generar mala interpretación de lo comunicado y hasta pueden ocasionar malentendidos que den lugar a reclamos.
Un nuevo artículo ofrece recomendaciones para garantizar una mayor seguridad para los involucrados.
El estudio, publicado en Archivos Argentinos de Pediatría, el Dr. Goldfarb, junto con la Dra. Laura Krynski, pediatra, de la Subcomisión de Tecnologías de Información y Comunicación de la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP), e Ignacio Maglio, Ph. D., abogado, y especialista en Riesgo Médico Legal, presentan mejores prácticas para el uso de la tecnología en el ámbito de la relación médico-paciente.
Los autores recomiendan que usted:
- Establezca con el paciente un tiempo de respuesta para los mensajes. No utilice este tipo de comunicación para emergencias.
- Establezca un acuerdo en relación con los días y horarios en que estará disponible para responder consultas por estos medios.
- Acuerde con los pacientes qué tipo de consultas usted aceptará y podrá gestionar de forma electrónica (por ejemplo: fotos, videos, documentos, radiografías, etc.).
- Informe a los pacientes acerca de las cuestiones de privacidad. Los pacientes deberían saber (si aplica) quién más puede tener acceso a sus mensajes.
- Incluya estas comunicaciones en la historia clínica.
- No utilice estos medios para consultas sensibles a la privacidad del paciente o familia.
- No reenvíe a terceros imágenes ni mensajes que incluyan información personal del paciente sin su consentimiento.
- En la mensajería instantánea: configure la confirmación de lectura a voluntad.
- Considere la utilización de una cuenta de correo electrónico exclusiva para la atención de consultas virtuales. En caso de implementarla:
- Incluya un texto fijo al pie que detalle los términos y condiciones que rigen estas consultas.
- Enseñe a los pacientes a categorizar el asunto en sus mensajes: necesidad de receta, agendar un turno, consulta médica, etc.
- Requiera que se incluya el nombre, apellido y edad del paciente en el cuerpo del mensaje.
- Configure en la cuenta de correo electrónico una respuesta automática para que el paciente sepa que su mensaje fue recibido y será respondido en un plazo determinado.
- La Sociedad Argentina de Pediatría tiene hoy un grupo de trabajo, que incluye varias comisiones, con el objetivo de definir un documento de posición que sirva de referencia. «Estamos pensando estrategias para que el pediatra no esté solo, tomar una actitud colectiva», concluye la Dra. Krynski.
Fuente: Medscape / Farmanuario.