La seguridad para disfrutar del sol siempre está presente, por lo que es importante proteger la piel contra los daños que causa la radiación ultravioleta (UV) durante todo el año, independientemente de las condiciones meteorológicas.
¿Por qué cuidarse? Porque la exposición al sol puede causar quemaduras solares, envejecimiento de la piel (como manchas cutáneas, arrugas o “piel cuarteada”), daño ocular y cáncer de piel.
Cómo reducir el riesgo de sufrir quemaduras de sol, cáncer de piel y envejecimiento prematuro de la piel
El daño que el sol inflige en el cuerpo está causado por la radiación ultravioleta (UV) invisible. Una quemadura solar es un tipo de lesión cutánea causada por el sol. El bronceado también es un signo de la reacción de la piel a la radiación ultravioleta posiblemente dañina mediante la producción de pigmentación adicional que ofrece cierta —aunque con frecuencia insuficiente— protección contra las quemaduras solares.
Pasar tiempo bajo el sol aumenta el riesgo de contraer cáncer o sufrir un envejecimiento prematuro de la piel. Este riesgo existe para personas con cualquier tono de piel.
Para reducir el riesgo, puede:
- Limitar el tiempo que pasa bajo el sol, especialmente entre las 11 a.m. y las 4 p.m., que es cuando los rayos del sol son más intensos.
- Vestir ropa que cubra la piel expuesta al sol, como camisas de manga larga, pantalones, anteojos de sol y sombreros de ala ancha. Ahora existe ropa de protección solar. (La FDA regula estos productos sólo si están destinados para fines médicos).
- Usar protectores solares de amplio espectro con un factor de protección solar (SPF, por sus siglas en inglés) de 15 o más con asiduidad y de acuerdo con las instrucciones. (Los protectores solares de amplio espectro ofrecen protección contra los rayos UVA y UVB, dos tipos de radiación ultravioleta emitidos por el sol.)
- Lea siempre la etiqueta para asegurarse de usar correctamente el protector solar, y pregunte a un profesional de la salud antes de aplicarlo a bebés de menos de 6 meses de edad.
- En general, la FDA recomienda usar un protector solar de amplio espectro con un SPF de 15 o más, incluso en los días nublados.
- Aplique protector solar abundante a toda la piel descubierta, especialmente en la zona de la nariz, las orejas, el cuello, las manos, los pies y los labios (pero evite que se introduzca en la boca y los ojos).
- Vuelva a aplicarlo cada dos horas. Aplíquelo con más frecuencia si nada o suda. (Recuerde leer la etiqueta del protector solar específico que utilice. Los adultos de tamaño normal o los niños necesitan al menos una onza [30 ml] de protector solar, aproximadamente la cantidad que se necesita para llenar una copita, para cubrir uniformemente el cuerpo).
- Si no tiene mucho pelo, aplique protector solar en la parte superior de la cabeza o utilice un sombrero.
- Ningún protector solar bloquea por completo la radiación ultravioleta, y se necesitan otras protecciones como ropa protectora, anteojos de sol y mantenerse a la sombra.
- Ningún protector solar es resistente al agua.
Fuente: FDA