El azúcar no es buena. Aumenta el riesgo de padecer enfermedades como diabetes tipo 2 y obesidad. La OMS recomienda que, si se ingieren azúcares libres, aporten menos del 10% de las necesidades energéticas totales y señala que si esa ingesta se reduce a menos del 5%, se pueden observar mejoras considerables en la salud.
El azúcar es el enemigo número 1 si buscas tener un cuerpo fuerte, flexible y atlético. No solo por las calorías que contiene, sino porque el azúcar engancha como una droga. Es sabido que el consumo de azúcar produce una rápida subida de la glucosa en sangre y un inmediato aumento de la hormona insulina.
Hay alternativas al azúcar para endulzar, pero ¿son de verdad sanos los edulcorantes?
Edulcorante natural
Los edulcorantes naturales son sustitutos del azúcar que a menudo se promocionan como opciones más saludables. Pero incluso estos «edulcorantes naturales» se han sometido, a menudo, a un proceso de elaboración y refinación. Suelen tener bastantes calorías, pero son, en general, más sanos que el azúcar, siempre y cuando se tomen con moderación. Se consideran edulcorantes naturales seguros, los jugos de frutas, la miel, la melaza y el sirope de arce, el agave, el azúcar de coco, hecho de savia de la palma de coco.
Edulcorantes artificiales
Los edulcorantes artificiales también se conocen como endulzantes intensos porque son mucho más dulces que el azúcar. Los más conocidos son sacarina, sucralosa y aspartamo.
En la década de 1970 se publicaron artículos que relacionaban a la sacarina con el cáncer de vejiga en ratas de laboratorio. Su relación con el cáncer se ha investigado profundamente, demostrando, tal como indica el Instituto Nacional contra el Cáncer, que no hay relación entre la sacarina (ni entre la sucralosa y el aspartamo) y el cáncer en humanos.
Los edulcorantes, como el resto de los aditivos alimentarios, están sujetos a un estricto control de seguridad por los distintos organismos encargados de la Seguridad Alimentaria. Así, los edulcorantes autorizados tanto por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) como por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (US FDA) y otras instituciones internacionales, como la Agencia Internacional para la Investigación en Cáncer (IARC), son seguros de usar dentro de los niveles de la ingesta diaria admisible (IDA).
Los edulcorantes artificiales y los sustitutos del azúcar pueden ayudar a controlar el peso, pero no son una solución mágica y solo deben usarse con moderación. La miel y el jarabe de arce tienen muchas propiedades, pero también muchas calorías.
Fuente: womanshealth.com