Un importante estudio sueco señala que el descenso importante de peso que produce la cirugía bariátrica, suele animar a los pacientes a revisar y reiniciar sus relaciones personales, probablemente como consecuencia de la mejora de su autoestima.
La cirugía de pérdida de peso puede afectar las relaciones personales. Un reciente estudio sueco ha revelado que una persona obesa que se somete a una operación de reducción de estómago tiene el 41% de posibilidades más de divorciarse que la población que no se somete al procedimiento.
El coautor del estudio Per-Arne Svensson, de la Academia Sahlgrenska de la Universidad de Gotemburgo, afirma que cuando uno decide someterse a una reducción de estómago suele perder «mucho más que sus quilos de más». «Las posibilidades de separarse si tenían pareja en el proceso previo aumentan y de casarse si estaba soltero también», confirma el estudio realizado con datos de dos grandes muestras, que tuvieron, y no, que someterse a operaciones de pérdida de peso.
El primer estudio comparó 29.234 individuos obesos que tuvieron cirugía para perder peso y 283.748 individuos en la población general. Las personas solteras que tuvieron cirugía para bajar de peso tenían un 35% más de probabilidad de casarse, y los pacientes de cirugía que estaban casados tenían un 41% más de probabilidades de divorciarse, en comparación con las personas de la población general.
Entre los pacientes que estaban casados desde el principio del estudio, la tasa de divorcio o separación (después de cuatro años) fue de alrededor del 9% en el grupo de cirugía en comparación con el 6% en el grupo de control. Después de 10 años, fue alrededor del 17% en el grupo de cirugía y alrededor del 12% en el otro grupo.
Nuevos matrimonios tras un proceso de reducción
Por otro lado, un segundo estudio comparó a 1.958 pacientes obesos que se sometieron a cirugía bariátrica con 1.912 que no lo hicieron. En general, 999 participantes fueron solteros al inicio. En este grupo, cuatro años después, casi el 21% de los que se sometieron a cirugía se habían casado o habían comenzado una nueva relación, en comparación con aproximadamente el 11% de los que no se sometieron a cirugía. Diez años más tarde, las tasas de matrimonio o nuevas relaciones eran casi del 35% en el grupo de cirugía y el 19% en el grupo sin cirugía.
Para Samer Mattar, presidente de la Sociedad Estadounidense de Cirugía Metabólica y Bariátrica, las cirugías de pérdida de peso resultan ser «una recalibración de las relaciones» y, tras ellas, «los pacientes se dan cuenta de que pueden salir de las relaciones infelices o iniciar nuevas saludables».
«La cirugía bariátrica magnifica y aclara los pros y los contras de las relaciones», ha manifestado Mattar afirmando que la inrervención no solo mejorará su salud y calidad de vida, también su capacidad para tomar «decisiones personales de manera independiente y con confianza”.
Redacción Médica/Tendencias en Medicina.