Para concientizar sobre la importancia de cuidar la piel durante la exposición solar, cada 23 de mayo tiene lugar el Día Mundial del Melanoma, un agresivo tipo de cáncer que se puede prevenir.
Por año se diagnostican en el mundo 160.000 casos de melanoma, el tipo de cáncer de piel más agresivo y que representa el 1,5% del total de los tumores que sufren tanto hombres como mujeres, según datos de la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). En los últimos años ha crecido el número de afectados por el melanoma, y debido a ello la Asociación Española de Dermatología y Venereología (AEDV) ha comenzado a considerarlo una epidemia mundial.
Los expertos recomiendan adquirir siempre productos de fotoprotección avalados y de garantía, y no reutilizarlos de un año para otro, pues su efecto se reduce
Cabe destacar que el 80% de los casos de este tipo de cáncer de piel se pueden prevenir con unas pautas de protección durante la exposición solar, según la AEDV. Para concienciar de la importancia de los hábitos saludables de fotoprotección cada 23 de mayo tiene lugar el Día Mundial del Melanoma. En esta jornada también se proporciona información sobre la prevención secundaria, es decir, sobre cómo se puede identificar de manera precoz un tumor, algo clave para la evolución de la enfermedad, pues las tasas de curación si se detecta a tiempo son de un 90%.
Cuidados de la piel en la exposición solar
Este tipo de cáncer de piel afecta por igual a mujeres y a hombres y puede aparecer a cualquier edad, aunque la mayoría se diagnostica entre los 40 y los 70 años. Llama la atención que aproximadamente el 81% de los casos de melanoma se dan en países desarrollados, los cuales tienen medios e información para poder protegerse del sol. Esto ocurre porque no se tiene el suficiente cuidado en la exposición solar, y en muchas ocasiones no se le da la importancia que en realidad tiene.
Para evitar el riesgo de melanoma se debe utilizar una crema con un factor de protección solar (FPS) de al menos 30. Si se tiene una piel blanca que tiende a quemarse hay que optar por un fotoprotector de 50 o más. Estos productos se deben aplicar al menos 30 minutos antes de la exposición al sol, y no solo cuando se vaya a pasar un buen rato en la playa o piscina, sino también antes de los paseos y de realizar actividades deportivas al aire libre. No hay que olvidar volver a aplicárselo cada dos horas para que dure el efecto protector.
Las personas que han utilizado cabinas de bronceado más de 10 veces a lo largo de su vida tienen un 34% más de riesgo de desarrollar cáncer de piel.
Cómo diferenciar un lunar de un melanoma: método ABCDE
El segundo paso para hacer una buena prevención frente a este tipo de cáncer es observar nuestra piel de manera habitual para poder así percatarnos de cualquier cambio de tamaño o aspecto en un lunar, o de la aparición de otros nuevos; de esta manera podremos detectar de manera precoz un melanoma. Estos son los aspectos en los que tienes que fijarte y por cuya primera letra se han denominado, el método ABCDE:
- Asimetría: los lunares benignos son simétricos, es decir si se dividiese a la mitad las dos partes serían iguales. Los melanomas son irregulares en su forma.
- Bordes: los bordes de los melanomas son irregulares y algo borrosos, mientras que los de los lunares están bien definidos.
- Colores: los lunares están formados por un solo color, que suele ser marrón. Sin embargo, los melanomas tienen varios colores.
- Diámetro: si el lunar mide más de 6 milímetros puede tratarse de melanoma, acude a tu dermatólogo.
- Evolución: hay que estar pendiente de los lunares, si presentan cambios es el momento de acudir al médico para realizarse una dermatoscopia digital y descartar un posible melanoma.