Viremia es un término que describe la presencia de virus en la sangre. Los virus son organismos microscópicos que sobreviven y se multiplican dentro de los huéspedes vivos, como animales y humanos.
Los casos menores de viremia pueden ser relativamente inofensivos y resolverse por sí solos. Sin embargo, si la infección se vuelve severa o causa infección en órganos vitales, puede provocar insuficiencia orgánica o sepsis, que pone en peligro la vida, especialmente en aquellos con sistemas inmunes comprometidos.
Los virus son parásitos, lo que significa que dependen de un huésped externo para su supervivencia y reproducción. Algunos virus pueden llegar al torrente sanguíneo, lo que provoca viremia.
Causas
La mayoría de los virus pueden causar viremia pero, aunque existen muchos tipos de virus en el mundo, solo algunos causan enfermedades en los humanos. A lo largo de la historia, los virus han sobrevivido gracias a su increíble capacidad de adaptación y a su resistencia tanto dentro como fuera de un huésped.
El agotamiento general, el dolor de cabeza y la fiebre pueden ser signos comunes de viremia e infección viral. Los síntomas dependen de la causa de la infección, pero muchas infecciones virales provocan un conjunto similar de síntomas.
Tratamiento
Las terapias recomendadas para las infecciones virales y la viremia pueden incluir descanso, líquidos abundantes, antiinflamatorios y analgésicos, antialérgicos, descongestivos, entre otros. Para la mayoría de las infecciones virales, el tratamiento implica lidiar con los síntomas de la infección más que con el virus en sí. En casos severos, los líquidos pueden administrarse por vía intravenosa en un hospital.
Ante cualquier síntoma de una infección vírica, consulte a su médico.
Muy interesante / Farmanuario.