La viruela símica o mejor conocida por estos días como viruela del mono ha estado en la televisión, la radio, los diarios y los portales. Y no es en vano. Los casos comenzaron a presentarse en los últimos meses fuera de su lugar originario: la República Democrática del Congo. Y la enfermedad llegó incluso a América Latina, generando la incertidumbre de si se transformaría en una pandemia como lo hizo la Covid-19.
Aunque los especialistas coinciden en que es poco probable que se llegue a una pandemia, y remarcan que el camino a nivel de vacunación ya existe, lo que significa una ventaja enorme si se la compara con lo que pasó con el coronavirus, igualmente es una enfermedad que parece estar expandiéndose y de la que deberíamos estar informados.
Se describió por primera vez en 1958 a raíz de 2 brotes de una enfermedad similar a la viruela en monos. El primer caso humano se reportó en República Democrática del Congo, desde entonces la mayoría de los casos reportados provienen de zonas rurales de la selva tropical de África central y occidental, donde se considera endémica, dicen desde el Ministerio de Salud Pública de Uruguay (MSP).
Para conocer más sobre esta enfermedad, repasamos cinco claves, basadas en la información de la Organización Mundial de la Salud y el MSP.
1). Es una enfermedad zoonótica viral rara, causada por el virus del mono, virus perteneciente al género Orthopoxivirus, Familia Poxviridae. Es transmitido a los humanos por diversos animales salvajes, en casos iniciales la infección se produce por contacto directo con sangre, carne, lesiones de piel o mucosas de animales infectados. La transmisión de persona a persona puede producirse por contacto estrecho con secreciones de las vías respiratorias o lesiones cutáneas, y se han reportado casos de transmisión sexual.
2). El período de incubación es de 5 a 21 días. Suele ser autolimitada y benigna. Los síntomas duran de 14 a 21 días. Comienza con fiebre, cefalea, ganglios linfáticos inflamados, artromialgias, astenia; de 1 a 3 días del inicio de la fiebre agregan erupción cutánea (máculas, pápulas, vesículas, pústulas, costras). Por lo general comienzan en rostro y luego se extienden al resto del cuerpo, afectando cara, palpa de manos, planta de los pies, puede comprometer mucosa bucal, genitales y ojo. La eliminación completa de las costras puede tardar hasta tres semanas.
3). Las muestras óptimas para el diagnóstico son las procedentes de las lesiones: frotis del exudado de las lesiones vesiculares o de las costras.
4). No hay tratamientos específicos, pero la vacunación antivariólica ha resultado eficaz para la prevención de la viruela símica. Esa vacunación no se administra en países como Uruguay desde la erradicación de la enfermedad. Pero podría utilizarse para control de un posible brote.
5). La letalidad es menor al 10% y los casos más graves se han reportado en niños pequeños.
Algunas recomendaciones para la prevención:
– Evitar contacto con animales que puedan ser reservorio del virus (roedores y primates).
– Manejo de animales enfermos con equipos de protección personal adecuado.
– Evitar el contacto estrecho con las personas infectadas.
– Aislamiento y asistencia de casos sospechosos con equipos de protección adecuados.
– Lavado de manos.
– Reportar síntomas a la autoridad sanitaria.
Fuente: OMS / MSP / Portal Salud