Las personas con artritis reumatoide (AR) pueden sentirse cansadas o agotadas, incluso después de una noche de sueño completo o cuando sus síntomas son leves. Hay varias opciones que pueden ayudarte a combatir la fatiga.
Tómate tu tiempo
Alternar períodos de actividad con períodos de descanso puede ayudarte a aumentar tus reservas de energía. Esto puede ser complicado de equilibrar, porque muy poca actividad también puede ser perjudicial. Puede ser útil planificar ciertas actividades para los momentos del día en los que tengas más energía.
Llevar un diario para registrar tus actividades y tus síntomas de artritis puede revelar qué actividades están provocando que tus síntomas empeoren. Esto puede ayudarte a planificar cómo realizar esas tareas de manera diferente.
Muchos empleadores ofrecen ahora horarios de trabajo más flexibles u oportunidades para trabajar desde casa, lo que puede ayudarte a gastar tu energía en los lugares más beneficiosos.
Procura dormir muy bien
Menos horas de sueño profundo te harán sentir más descansado que más horas de sueño deficiente.
- Maneja el dolor nocturno. Si el dolor en las articulaciones no te deja dormir, habla con tu médico sobre cómo ajustar tus medicamentos para controlar mejor el dolor por la noche.
- Establece una rutina. Acuéstate casi a la misma hora todas las noches. Tener un horario regular puede hacer que te sea más fácil dormirte.
- Crea un ambiente tranquilo. Usa cortinas que impidan que pase la luz o una máscara para los ojos y tapones para los oídos para asegurarte de que la habitación sea lo más oscura y silenciosa posible.
- Ponte cómodo. Un colchón de espuma viscoelástica y almohadas que sirvan para apoyarse cómodamente pueden ayudar a que sea menos probable que te despiertes durante la noche por dar vueltas y vueltas.
Controla la depresión
La depresión a menudo causa fatiga, y es común en personas con enfermedades inflamatorias dolorosas como la artritis reumatoide. El asesoramiento y los medicamentos antidepresivos pueden ser muy útiles. Muchos médicos recetan antidepresivos en dosis bajas como ayuda para dormir, incluso para personas a las que no se les diagnosticó depresión.
Hacer ejercicio regularmente
El ejercicio regular de bajo impacto, como caminar, nadar o andar en bicicleta, puede aumentar la energía, combatir la fatiga y promover el sueño profundo si tienes artritis.
- El ejercicio reduce el dolor al aumentar la masa muscular, la fuerza, la flexibilidad y la circulación sanguínea.
- El ejercicio ayuda a aliviar la ansiedad o depresión que pueda estar agobiándote al hacer que el cerebro libere hormonas que alivian el estrés.
Finalmente, para no pagar el precio más adelante, resiste la tentación de hacer muchas actividades cuando te sientas bien. Si hablas con el médico y, con paciencia, haces algunos ajustes en tu estilo de vida, puedes reducir la fatiga relacionada con la artritis reumatoide y recuperar las ganas.
Mayo Clínica.