En la búsqueda mundial de tratamientos contra el coronavirus, un fármaco antiviral japonés conocido como Avigan (favipiravir)
ha contado con la aprobación del Primer Ministro, Shinzo Abe, y 128 millones de dólares en financiación por el gobierno.
Pero este no es el único.
Camostat, un fármaco de 35 años de antigüedad para tratar la pancreatitis, producido por Ono Pharmaceutical Co., con sede en Osaka, Japón, ha captado el interés de científicos en Japón y en el extranjero con poco entusiasmo o ayuda del estado.
Los dos compuestos figuran entre las docenas que se someten a pruebas en todo el mundo, e ilustran cómo la carrera por desarrollar tratamientos y vacunas todavía está bien abierta pese a políticos como Abe y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que promueven los beneficios potenciales de determinados fármacos.
Remdesivir, de Gilead Science Inc., ha llevado la delantera después de resultados promisorios de estudios iniciales que indujeron a la aprobación urgente en Estados Unidos y Japón. Aunque se ha demostrado que remdesivir es promisorio para reducir los tiempos de restablecimiento de pacientes hospitalizados, recientemente se demostró que no disminuye de forma concluyente la mortalidad de dichos pacientes, según el estudio “Remdesivir in adults with severe COVID-19: a randomised, double-blind, placebo-controlled, multicentre trial”.
El interés en Avigan se disparó en marzo después de que un funcionario chino dijera que parecía ayudar a los pacientes a restablecerse de COVID-19. Ahora es objeto de un mínimo de 14 estudios clínicos. Abe ha pedido que se apruebe Avigan para uso hacia finales de este mes si los estudios resultan eficaces; rapidez sin precedente, sobre todo para un fármaco que produce malformaciones congénitas.
La administración de Abe ha prometido abastecer sin costo el fármaco, y aproximadamente 43 países han hecho peticiones formales. El uso de Avigan es decidido por los médicos, y su aprobación dependerá de la evaluación médica y científica a su debido tiempo.
Destructivo para los fetos
Avigan, conocido con el nombre genérico de favipiravir, fue desarrollado a finales de la década de 1990 por una compañía que más tarde fue adquirida por Fujifilm como parte de su transición del negocio de la fotografía a la asistencia sanitaria.
El fármaco funciona haciendo un cortocircuito en el mecanismo de reproducción de determinados virus de ARN, como el de la influenza. Sin embargo, el mecanismo que le confiere eficacia a Avigan contra los virus también lo vuelve destructivo al rápido crecimiento celular de los fetos.
Después de evaluarlo contra diversos virus, Avigan fue aprobado finalmente en Japón en 2014, pero únicamente para uso de urgencia contra la epidemia de influenza, y fue autorizado en China, donde desde entonces ha salido del régimen de patentes.
Mesilato de camostat tampoco está comprobado en el ámbito clínico. Camostat fue desarrollado por Ono Pharmaceutical, más famoso por su fármaco antineoplásico exitoso Podivo, y es un inhibidor de proteasa que se ha utilizado principalmente para tratar la pancreatitis y algunos tipos de cáncer. Sin embargo, pruebas de laboratorio y en animales demostraron que tiene propiedades antivirales contra SARS-CoV-1, y se puede administrar sin riesgo en dosis suficientemente altas para alcanzar las mismas concentraciones que fueron eficaces en el laboratorio.
Un estudio publicado en marzo en la revista científica Cell demostró que camostat bloquea una enzima esencial para la entrada del coronavirus en los pulmones, lo que atrajo el interés de investigadores, quienes están planificando diferentes estudios clínicos de camostat.
Ono hizo el lanzamiento comercial de camostat, conocido en Japón como Foipan, como un tratamiento para la pancreatitis crónica en 1985 y la esofagitis por reflujo posoperatorio en 1994. La compañía ahora está suministrando el fármaco para estudio de COVID-19 en Japón y en el extranjero.
Es importante ser objetivos en la evaluación de estos fármacos para el problema en cuestión y esperar los resultados de ensayos clínicos de eficacia con una metodología rigurosa.
Medscape / Farmanuario.

