Se dice que el chocolate es bueno para el estado de ánimo, incluso se le atribuyen virtudes antidepresivas. Sin embargo, los estudios no son concluyentes.
Para explorar el impacto real del chocolate, un equipo de investigadores ingleses y canadienses realizó un gran estudio, comparando los diferentes tipos de chocolate consumidos, amargo y no amargo, tratando de deshacerse de los factores de confusión.
Este estudio es el primero en analizar la asociación entre la depresión y el chocolate dependiendo del tipo de chocolate consumido y los resultados sugieren que comer chocolate amargo (≥45% cocoa) puede afectar positivamente el estado de ánimo y aliviar los síntomas depresivos.
Utilizando datos de la US National Health and Nutrition Examination Survey (NHANES), los investigadores descubrieron que las personas que informaron haber consumido chocolate amargo en dos periodos de 24 horas tenían 70% menos probabilidades de informar síntomas depresivos clínicamente relevantes, en comparación con sus contrapartes que informaron no consumir chocolate.
El estudio fue publicado en versión electrónica el 29 de julio en Depression and Anxiety.
Mejora el estado de ánimo
Se han propuesto varios mecanismos para una relación entre el chocolate y el estado de ánimo.
El chocolate contiene una serie de ingredientes psicoactivos, incluidos dos análogos de anandamina, que producen efectos similares a los de un cannabinoide, un agente que provoca sensaciones de euforia al ingerir cannabis. Además, el chocolate contiene feniletilamina, un neuromodulador que se considera importante para regular el estado de ánimo.
Entre los participantes del estudio, los que informaron cualquier consumo de chocolate negro tuvieron 70% menos probabilidades de informar síntomas depresivos clínicamente relevantes, en comparación con aquellos que no comieron chocolate. Sin embargo, los investigadores no encontraron un vínculo significativo entre el consumo de chocolate no oscuro y los síntomas depresivos clínicamente relevantes.
Se necesita más investigación para aclarar la causalidad: podría ser el caso de que la depresión haga que las personas pierdan su interés en comer chocolate, o podría haber otros factores que hagan que las personas sean menos propensas a comer chocolate amargo y deprimirse.
En caso de que se establezca una relación causal que demuestre un efecto protector del consumo de chocolate sobre los síntomas depresivos, se debe comprender el mecanismo biológico para determinar el tipo y la cantidad de consumo de chocolate para una prevención y manejo óptimos de la depresión.
Medscape / Tendencias en Medicina.
