Con la llegada de los primeros fríos, las personas comenzamos a tomar los primeros recaudos para mejorar nuestras defensas y evitar enfermarnos. Pero, ¿sabías que también podés hacer lo mismo con tus mascotas?
Mantener el sistema inmunológico fuerte es clave para que perros y gatos vivan sanos y felices. Para eso, una buena alimentación es el primer paso: elegir un alimento balanceado y de calidad, adecuado para su edad y tamaño, aporta los nutrientes esenciales para sus defensas.
Incluir en su dieta suplementos naturales como omega 3, probióticos o vitaminas (siempre bajo recomendación veterinaria) también puede reforzar su salud.
El ejercicio regular es otro pilar importante: paseos, juegos y estimulación mental fortalecen no solo su cuerpo, sino también su bienestar general. Además, no hay que olvidar el calendario de vacunación y desparasitación, fundamentales para prevenir enfermedades.
Un entorno limpio y libre de estrés ayuda a evitar que sus defensas se debiliten. El contacto afectivo también influye: una mascota querida y cuidada emocionalmente responde mejor ante virus y bacterias.
Por último, las visitas regulares al veterinario permiten detectar a tiempo cualquier problema.