Cada año, el 28 de julio, la Organización Mundial de la Salud (OMS) conmemora el Día Mundial contra la Hepatitis, con el fin de concientizar sobre la hepatitis viral y las enfermedades que causa. Esta fecha conmemora el natalicio del profesor Baruch Samuel Blumberg, Premio Nobel, descubridor del virus de la hepatitis B. Cada año, el Día Mundial contra la Hepatitis adopta un tema para centrar la campaña, apuntando los últimos años a enfatizar la importancia de actuar a tiempo. El lema de este año es: “Elimina la hepatitis”.
Existen cinco tipos de virus de la hepatitis: A, B, C, D y E. Todos los virus de la hepatitis pueden causar infección aguda e inflamación hepática, pero la infección con los virus de la hepatitis B, C y D también puede provocar hepatitis crónica que puede derivar en cirrosis y cáncer de hígado. La mayoría de las personas infectadas desconocen su infección y continúan siendo portadoras del virus. Por lo tanto, presentan un alto riesgo de desarrollar una enfermedad hepática crónica grave y pueden transmitir el virus a otras personas sin saberlo.
Por lo tanto, los esfuerzos para combatir la hepatitis viral deben centrarse en aumentar la concientización sobre la enfermedad, mejorar la prevención promoviendo la vacunación, las prácticas sexuales seguras y las prácticas de inyección seguras, y garantizar tratamientos accesibles y asequibles. El objetivo de la terapia antiviral es controlar la replicación viral, evitar la progresión a cirrosis y el desarrollo de hepatocarcinoma.
Las hepatitis son prevenibles y tratables: existen vacunas y tratamientos efectivos para la hepatitis B y más del 95% de las personas con hepatitis C pueden curarse con el tratamiento. La eliminación de la hepatitis como un problema de salud pública es un objetivo de la agenda 2030, que plantea un mayor acceso para prevenir y tratar a aquellas personas afectadas.
Abordaje terapéutico
El tratamiento se basa en medidas higienico-dietéticas y farmacológicas. En cuanto a las primeras medidas, se debe indicar una dieta “hepática” centrada en alimentos de fácil digestión, rica en frutas, verduras, granos integrales y proteínas magras, evitando alimentos grasos, azúcares refinados y alcohol.
Se encuentra disponible tratamiento farmacológico para las hepatitis B y C, dado que son las que evolucionan a la cronicidad.
- Hepatitis B: las opciones terapéuticas incluyen interferón o antivirales. Particularmente los antivirales son muy eficaces para controlar el virus, pero la curación definitiva de la es poco frecuente, por lo que en general el tratamiento es crónico, para evitar la progresión de la enfermedad y la aparición de complicaciones.
- Hepatitis C: en este caso los fármacos disponibles tienen una eficacia del 99% de curación, por lo que el objetivo final es tratar a todos los pacientes que tengan hepatitis C para erradicar la enfermedad. La OMS recomienda los tratamientos basados en los Antivirales de Acción Directa (AAD) para todos los pacientes con hepatitis C. Estos fármacos impiden que el virus se multiplique e infecte nuevas células.
Se recomienda revisar las guías de tratamiento y la cobertura de cada país antes de iniciar un tratamiento.
Referencias
- SDG Resource Centre. Día Mundial contra la Hepatitis 2025. SDG Relx. https://sdgresources.relx.com/events/world-hepatitis-day-2025
- Organización Paramericana de la Salud. Día Mundial de la Hepatitis. Eventos. https://www.paho.org/es/eventos/dia-mundial-hepatitis
- World Hepatitis Alliance. World Hepatitis Day. http://www.worldhepatitisday.org/
- Cleveland Clinic. (27 de marzo de 2025). Hepatitis viral. Biblioteca de salud. https://my.clevelandclinic.org/health/diseases/4245-hepatitis-viral-hepatitis-a-b–c
- Clinic Barcelona. (20 de setiembre de 2018). Hepatitis vírica. Enfermedades, síntomas y estados de salud. https://www.clinicbarcelona.org/asistencia/enfermedades/hepatitis-virica/tratamiento

 
                                    