Este 26 de marzo se conmemora el Día Mundial de Prevención del Cáncer de Cuello Uterino, una instancia para promover acciones que permitan salvar vidas en todo el mundo.
El cáncer de cuello uterino es una de las principales causas de muerte en mujeres, pero es altamente prevenible con medidas adecuadas. La principal causa de este cáncer es la infección persistente por el Virus del Papiloma Humano (VPH), un virus de transmisión sexual.
Para prevenirlo, es fundamental la vacunación contra el VPH en niñas y niños desde los 9 años, lo que reduce significativamente el riesgo de infección. Además, las mujeres deben realizarse pruebas de detección como el Papanicolaou y la prueba de VPH, que permiten identificar células anormales antes de que se conviertan en cáncer.
El uso de preservativos durante las relaciones sexuales también ayuda a reducir el riesgo de infección, aunque no lo elimina por completo.
Asimismo, evitar el tabaco es clave, ya que fumar debilita el sistema inmunológico y favorece el desarrollo del cáncer.
Mantener un estilo de vida saludable, con una alimentación equilibrada y ejercicio regular, contribuye a fortalecer el sistema inmunológico.
Recordá que la prevención y la detección temprana son la mejor estrategia para reducir la mortalidad por esta enfermedad.