Sentarse debajo de una sombrilla en la playa no reemplaza el uso del protector solar, según demuestra un nuevo estudio dirigido por Hao Ou-Yang y un coautor que trabajan para Johnson & Johnson Consumer Inc., Nueva Jersey.
El 78% de los participantes que utilizaron sólo la sombrilla durante unas pocas horas en la playa estaba quemado al día siguiente, comparado con el 25% de los usuarios de un protector FPS 100.
Aun así, ninguna de las dos opciones fue un 100% efectiva. «Es bueno tener un enfoque holístico», opinó Hao Ou-Yang. «Hay que pensar en una combinación de medidas», agregó.
La empresa financió parcialmente el estudio. El equipo convocó a 81 personas de piel clara y les pidió que pasaran 3,5 horas expuestas al sol de mediodía en el Lago Lewisville, Texas, en agosto de 2014. Al azar, lo hicieron con un protector FPS 100 o debajo de una sombrilla de playa. Al día siguiente se les controlaron las quemaduras solares.
El equipo identificó 142 áreas quemadas en los 41 usuarios de sombrilla y sólo 17 en los usuarios con protector. En total, 32 usuarios de sombrilla tuvieron quemaduras, comparado con 10 usuarios de protector solar. En JAMA Dermatology, el equipo publica que las sombrillas de playa están diseñadas para bloquear los rayos directos del sol, pero no protegen de los rayos difusos.
«No hay que confiar en un solo método de protección solar», dijo la doctora Jennifer Stein, dermatóloga del Centro Médico Langone de NYU, Nueva York. «La forma más segura de estar al aire libre es evitar el mediodía, sentarse a la sombra y usar prendas protectoras y pantalla solar», agregó la especialista.