¿Sabías que el uso del Sistema de Retención Infantil (SRI) es fundamental para garantizar la seguridad de los niños durante los desplazamientos en vehículos? Por eso, su obligatoriedad no es una mera imposición legal, sino una medida de protección basada en estudios que demuestran su eficacia en la reducción de lesiones y muertes en accidentes de tránsito.
Los niños tienen una complexión más frágil que los adultos y, en caso de siniestro, el impacto puede ser muy negativo si no están correctamente asegurados. Los SRI están diseñados para adaptarse a su tamaño y peso, minimizando así el riesgo de lesiones graves.
Además, el uso del cinturón de seguridad convencional no es seguro para menores de cierta edad, ya que no está diseñado para su estructura corporal.
Las normativas internacionales y locales establecen diferentes tipos de SRI según la edad y el peso del niño, desde sillas para bebés hasta asientos elevadores.
Así las cosas, es clave que los padres y cuidadores no solo cumplan con la ley, sino que también comprendan la importancia de elegir, instalar y usar correctamente estos dispositivos.
Varios organismos estatales y también no gubernamentales ofrecen asesoría gratuita para colocar de forma correcta los dispositivos en los vehículos: no dudes en consultar.
