Está claro que, por la forma de vida que llevamos actualmente, muchos perros conviven con pantallas encendidas: televisores, tablets, celulares o computadoras. Aunque algunos parecen ignorarlas, otros reaccionan a imágenes o sonidos, con ladridos o movimientos rápidos. Pero, ¿es perjudicial que los perros miren pantallas?
En general, no hay evidencia de que mirar pantallas ocasionalmente cause daño físico a los perros. Por un lado, sus ojos están preparados para procesar imágenes de forma diferente a la humana: tienen menos percepción de colores y mayor sensibilidad al movimiento. Por eso, no siempre distinguen lo que aparece en una pantalla como lo haría una persona.
Además, los dispositivos modernos con alta frecuencia de actualización permiten que vean imágenes más fluidas que en televisores antiguos, donde las percibían como parpadeos.
Sin embargo, una exposición excesiva o mal gestionada puede afectar su bienestar. Si un perro pasa mucho tiempo mirando pantallas por falta de estímulos reales, puede aburrirse, ponerse ansioso o mostrar conductas poco saludables.
También es importante evitar contenidos que lo alteren o lo asusten.
