Los objetivos de la atención médica son prevenir enfermedades, realizar diagnósticos y tratamientos oportunos, y promover la salud. La consulta médica y el chequeo anual son fundamentales también en los meses de verano. A continuación, una nota del Dr. Stefano Fabbiani, publicada originalmente en nuestra revista hermana Hola Salud.
La consulta médica es el encuentro entre un paciente y un profesional médico que tiene como objetivo evaluar, diagnosticar y brindar tratamiento adecuado de las condiciones de salud que presente el paciente. Además de diagnosticar y tratar enfermedades, la consulta médica también desempeña un rol fundamental en la prevención de enfermedades y la promoción de hábitos de vida saludables.
Puede realizarse en cualquier nivel de asistencia: primer nivel de atención o policlínica, segundo nivel u hospitales generales, o en el tercer nivel, donde se atienden patologías complejas que requieren procedimientos especializados y de alta tecnología. Sin embargo, el primer nivel de atención es el más cercano a la población y permite resolver las necesidades de atención básicas y más frecuentes, por lo que la consulta anual debería realizarse allí.
La consulta en policlínica se enfoca en la prevención de enfermedades y la promoción de un estilo de vida saludable. A través de brindar información, el interrogatorio, el examen físico y la realización de exámenes es posible identificar patologías de forma precoz y controlar su evolución. Además, la consulta médica es un espacio para sacar dudas, obtener información sobre medicamentos, terapias alternativas o cualquier otra inquietud relacionada con la salud.
En nuestro país, la atención primaria en salud se ha venido desarrollando en los últimos años, en particular, por médicos de familia. Sería recomendable que el control anual sea con el médico de cabecera, o con el médico de familia, que además de este chequeo, tienen una formación integral que considera no solo los aspectos físicos, sino también los emocionales y sociales que conforman la salud. Médicos generales también pueden ser quienes realicen el control y chequeo anual.
Que el verano no haga olvidar tu salud
En los meses de calor como en verano, solemos realizar más actividades, sentirnos mejor y con más ganas, y en las fiestas y las vacaciones con frecuencia comemos alimentos de mala calidad nutricional y consumimos más alcohol, por lo que es posible que dejemos de lado nuestra salud o esta se vea afectada.
Realizar un chequeo previo a los meses de verano es una buena práctica para disfrutar después sin preocupaciones. En caso de no poder, al retorno de las vacaciones es un buen momento para realizarlo previo a volver a la rutina y a “empezar” el año. Considerando que en verano nuestros hábitos cambian, sería apropiado priorizar los controles básicos de presión arterial, altura, peso e índice de masa corporal, además de glicemia, perfil lipídico, función renal y hepática y examen de orina.
En suma, la consulta médica es un componente esencial de la atención médica. Proporciona un espacio dedicado para recibir atención profesional, diagnóstico preciso, tratamiento adecuado y orientación sobre cómo mantener y mejorar la salud en general. Aprovechar este recurso valioso ayudará a cuidar de ti mismo de manera integral y a tomar decisiones informadas sobre el bienestar a lo largo de la vida.
¿Qué chequeos deben realizarse en el año?
Los controles y chequeos anuales recomendados son presión arterial, altura, peso, índice de masa corporal, glicemia (“azúcar” en sangre), perfil lipídico (colesterol y otras grasas en sangre), hemograma, examen de orina, detección de depresión, violencia doméstica y hábitos tóxicos (alcoholismo, tabaquismo, otras sustancias), y control auditivo y visual.
Además, es importante realizar una serología para infecciones como sífilis (VDRL), VIH (virus de inmunodeficiencia humana) y hepatitis. Según la edad y el sexo, se recomienda hacer prueba de Papanicolau (PAP) a las mujeres a partir de los 25 años y mamografía entre los 40 y los 65 años, detección de sangre oculta en heces (PSI; y pesquisa de sangre intestinal) entre los 50 y 74 años, tanto en hombres como mujeres.
En Uruguay, desde el año 2017, las instituciones de salud deben proporcionar el carné de salud sin costo, el cual incluye glicemia, creatininemia (función del riñón), perfil lipídico, hemograma, VDRL, VIH, PAP, PSI, mamografía y examen de orina. Este carné, que es un requisito para trabajar, es una oportunidad para realizarse algunos de los controles más importantes de manera anual.