El 6 de febrero se conmemoró el día internacional de tolerancia cero con la mutilación genital femenina.
Por mutilación genital femenina (MGF) se entiende todo procedimiento que suponga la extirpación parcial o total de la vulva, u otro tipo de lesión por motivos no médicos.
Cada año, más de 3 millones de niñas en todo el mundo corren el riesgo de ser mutiladas, y la mayoría de ellas sufren esta práctica antes de cumplir los 15 años.
Estos números aumentaron por la pandemia de Covid-19 por el cierre de las escuelas, los confinamientos y la alteración de los servicios sanitarios.
Se realiza para lograr la aceptación social y es una forma de conservar la virginidad de la niña o adolescente, para que sea considerada pura y así sea mas fácil casarla. También para aumentar el placer sexual masculino.
Es considerada como un rito de transición hacia la vida adulta y un requisito prematrimonial.
Las menores que sufren esta práctica corren un mayor riesgo de contraer matrimonio infantil y de abandonar la escuela, un escenario que amenaza su capacidad de construir un futuro mejor tanto para ellas como para sus familias y comunidades.
Esta práctica no solamente es extremadamente dolorosa y angustiante, sino que conlleva un riesgo permanente de contraer infecciones, representa un trauma en la vida de las mujeres y anula su capacidad de sentir placer por el resto de su vida.
ES UNA VIOLACIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS
Construyamos un mundo que respete la integridad y la autonomía de las mujeres.
Dra. Fiamma Dellacasa.
Fuentes: BBC / Unicef.