Con una inversión de US$ 36,5 millones, Urufarma inauguró recientemente su nuevo complejo industrial en Canelones, que se conforma de tres plantas productivas, entre ellas una dedicada a la fabricación de fármacos onco hematológicos. Con esta apuesta el laboratorio busca posicionarse tanto en el mercado local como a nivel internacional.
El complejo industrial, cercano al Aeropuerto de Carrasco, está conformado por un edificio de oficinas diseñado por el prestigioso arquitecto Carlos Ott; una planta de fabricación de medicamentos no segregados (analgésicos, antibióticos, antipiréticos, entre otros) con una superficie de 1.250 metros cuadrados; una planta de hormonales que abarca 1.200 metros cuadrados; un laboratorio de control de calidad de última generación capaz de asegurar el cumplimiento de las normas más estrictas a nivel nacional e internacional; y una planta de fármacos onco hematológicos, única en su tipo en el país, con 800 metros cuadrados de instalaciones.
La consolidación de todas las operaciones en este nuevo complejo industrial demandaron la inversión de US$ 6 millones destinados a equipamiento europeo de última generación que asegura los más exigentes niveles de calidad con el menor impacto en el medioambiente y posiciona al laboratorio como referencia de la industria. El diseño del complejo fue validado con consultores internacionales para lograr estándares en construcción, instrumental y equipamiento al nivel de los exigidos por agencias sanitarias como la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) y la Agencia Europea de Medicamentos (EMA).
“Unificar las operaciones en un mismo complejo era un objetivo prioritario desde que empezamos a fabricar en la planta de productos hormonales, que se convirtió en nuestra principal línea de negocios, porque contribuye a seguir cumpliendo con la regulación más avanzada de la industria, que requiere tener una planta industrial y laboratorio de control de calidad juntos”, comentó el gerente general de Urufarma, Fernando Moreira.
En esta planta se producirán los primeros medicamentos genéricos del mercado con moléculas específicas para las terapias oncológicas, con beneficios en la accesibilidad para los pacientes y que permitirá a Uruguay autoabastecerse de los fármacos y asegurar su disponibilidad.
La capacidad de producción de la planta de oncológicos se caracteriza por su flexibilidad, diseñada para adaptarse a las necesidades del mercado. Esto permite producir lotes que van desde 1 hasta 50 kilogramos, asegurando una respuesta ágil y eficiente a la demanda en constante evolución del sector.
Al mismo tiempo, se abre la posibilidad de exportar medicamentos oncológicos hacia nuevos mercados, que se sumarán a los que ya exporta la firma como Argentina, Chile, Colombia, Perú y Ecuador, entre otros.
Esta ampliación de la capacidad productiva de Urufarma generará más puestos de trabajo, empleando en una primera etapa a 245 personas, con la apuesta a seguir creando fuentes laborales en la medida que los productos ingresen a nuevos mercados.
Además, la presencia de esta planta revitaliza la economía local, a partir del crecimiento de servicios y emprendimientos adyacentes, generando un efecto multiplicador en la zona.
Fiel a su compromiso con el cuidado del medioambiente, en el nuevo complejo Urufarma ha desarrollado tecnologías innovadoras que aseguran que sus procesos tengan la mínima afectación del medio ambiente y ha implementado un sistema de gestión de eficiencia de la energía que permite optimizar su uso, reducir el impacto ambiental y ejecutar un mecanismo de mejora continua que ayuda a detectar nuevas oportunidades de eficiencia.
Además, la compañía permanece en constante innovación de sus procesos y mantiene un estricto cumplimiento de altos estándares de calidad en la industria farmacéutica en Uruguay, actualizándose de acuerdo con las últimas exigencias tanto de la Organización Mundial de la Salud (OMS) como de los parámetros que manejan las mencionadas Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) y la Agencia Europea de Medicamentos (EMA).
